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miércoles, 16 de febrero de 2011

No sois vuestros pensamientos.

Cuando permitáis que esto ocurra se demostrará que muchos de los pensamientos que tenéis no os hacen bien, y que de hecho, perturban vuestra paz mental.

Mensajes para asistiros en vuestro despertar de un estado de ensoñación están fluyendo de muchas Fuentes mientras el momento para este impresionante evento se aproxima cada vez más.

La cantidad de seres sensibles que os ofrecen aliento y apoyo es impresionante porque hay muchísimos de vosotros, y ninguno está solo o sin guía y amor.

Si estáis teniendo dificultades en acceder o creer en ello, es porque vuestro miedo a la desilusión y vuestras dudas sobre si sois dignos de ser parte de este gran despertar, que de hecho está sucediendo, os distraen y os dificultan en sentir el amor y la guía que os está siendo ofrecida.

Anteriormente he remarcado la importancia de tomar descansos regularmente a lo largo del día para relajaros y acallar vuestras mentes para que vuestras preocupaciones y ansiedades ilusorias no os sobrecojan.

Cuando olvidáis hacer esto, o cuando os tomáis el tiempo solo pero permitís que vuestras preocupaciones ocupen vuestra atención, vuestro soporte para la ilusión se intensifica y las dudas se multiplican.

Poned atención en vuestros pensamientos de preocupación y ansiedad; daros cuenta que son pensamientos de los cuales podéis desconectaros.

No tenéis que ser absorbidos por ellos de modo que parezca que vuestras preocupaciones y vosotros sois uno- pues meramente son pensamientos e ideas que podéis desechar.


Todos habéis experimentado cuando la gente comparte sus pensamientos con vosotros –pensamientos con los cuales no resonáis- y no habéis tenido dificultad en soltarlos y no prestarles atención.

Muchos de los pensamientos que flotan por vuestras mentes son así. Esto es solamente porque los humanos tienden a identificarse a sí mismos con los pensamientos que fluyen por sus mentes de modo que encontráis difícil no poner atención a todos como si tuviesen gran valor para vosotros.

Pero no sois vuestros pensamientos, y podéis ver esto fácilmente por medio de poner vuestra atención en cualquier pensamiento que os ocurra y decidir reemplazarlo por uno distinto. Los pensamientos se van, vosotros os quedáis.


En vuestros periodos diarios de silencio, podéis practicar observar vuestros pensamientos mientras fluyen por vuestras mentes, y tomar decisiones sobre si queréis o no ponerles atención.

Cuando hagáis esto y escojáis no prestarles atención a algunos de ellos, vuestras mentes se acallarán, dejando espacios para que las respuestas de vuestros guías- a preguntas a las que estáis estado buscando respuestas –se filtren a vuestra consciencia.

Cuando permitáis que esto ocurra se demostrará que muchos de los pensamientos que tenéis no os hacen bien, y que de hecho, perturban vuestra paz mental.

Cuando os deis cuenta de esto encontraréis más fácil reconocerlos o dejarlos ir, y al hacer esto os encontraréis con más calma y paz mientras el estrés de la vida diaria se reduce y los pensamientos que os causan preocupación y ansiedad ocuparán muchísimo menos de vuestro tiempo.

Frecuentemente observaréis que muchos de ellos tratan sobre lo que otros pensarán o no, o lo que digan o hacen, y no hay nada que podáis hacer en este frente, excepto dejarlos ir. Si es necesario responder lo haréis a su debido tiempo …darle vueltas antes de tiempo es frecuentemente más bien contraproducente.


Mientras os tomáis vuestro descanso…relajaros. Recordaros a vosotros mismos que estáis donde tenéis que estar, y que el Amor de vuestro Padre os apoya en todo momento.

Si no fuese así, no existiríais. Os despertaréis, y vuestra dicha será extática, porque Él Os ha creado con Amor para que existáis en la eterna felicidad junto a Él, y ninguna otra opción es necesaria o está disponible.

Con muchísimo amor, Saul.

Traductor: Macarena Herreros

Email : macaherreros@gmail.com



02/09/2011 by John Smallman

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